«Gracias a Dios no soy como…», es una manera de pensar de la que es difícil escapar. Tendemos a ver a quien es diferente como a un adversario, ubicado en una orilla opuesta a la nuestra, en un lugar indeseable del que, gracias a Dios, estamos muy lejos. Liberal, conservador, funda, progre, son etiquetas que vamos repartiendo a diestra y siniestra. ¿Hay forma de cerrar ese círculo vicioso?

Escucha esta reflexión basada en Lucas 18,9-14 y pensemos un momento acerca de esta parábola de Jesús.

Para encontrar más reflexiones: Cancionero Cristiano en Instagram: Meditaciones • Instagram

Dejar una respuesta